Por África González
El papa Francisco está de visita en R.D. de Congo y hoy viaja a Sudán del Sur .
Impresionante la acogida que han demostrado los católicos al papa Francisco, en Kinshasa, la capital de R. D. de Congo. Los dos países tienen un denominador común: haber sufrido décadas de conflictos y seguir viviendo la descarnada situación que provoca toda guerra. El papa Francisco que anhelaba ambos viajes, no defraudó a la de millones de católicos que esperaban con emoción este encuentro.
En la homilía de la misa del miércoles 1 de febrero en Kinshasa el Papa dio tres claves para salir de la espiral de violencia y alcanzar la paz: «tres manantiales para seguir alimentándola son el perdón, la comunidad y la misión».
«¡Cuánto bien nos hace limpiar nuestros corazones de la ira, de los remordimientos, de todo resentimiento y envidia! Queridos amigos y amigas, ¡que hoy sea el momento de gracia para acoger y experimentar el perdón de Jesús! Que sea el momento adecuado para ti, que llevas una pesada carga en el corazón y necesitas que te la quiten para poder volver a respirar», ha dicho el Santo Padre.
En un momento en el que se está viviendo un recrudecimiento de la violencia, sobre todo en el este, en la frontera con Ruanda y donde existen cerca de 120 grupos armados, el Papa les instó: «Dejad las armas, abrazad la misericordia».